Raúl Santiago, uno de sus fundadores, era un apasionado por su empresa. En ella diseñó maquinarias y gestó productos que hasta el día de hoy continúan siendo líderes del mercado y uno de los más innovadores: el “cono doble”.
Siguiendo con su legado, la compañía lleva entre sus valores, la inversión contínua aplicada a los procesos productivos y la mejora contínua obteniendo productos de excelente calidad en sabor, textura y diseño.
Incluso desarrollando sectores nuevos para los contenedores de masa, como lo son el repostero, golosinero y farmacéutico.
Nace en la ciudad de Córdoba en el año 1988 como una empresa familiar, productora de envases de pasta para helados.